
Un Stonewall para la Iglesia
Juanjo Peris. Cuando la clientela del Stonewall Inn se rebeló contra la policía de Nueva York que entraba a practicar detenciones en la madrugada del 28 de junio de 1969, no se podía imaginar que estaba encendiendo la mecha de un movimiento de protesta y defensa de los derechos humanos. Stonewall supuso seis días de revueltas y sólo un mes más tarde se fundaba el Frente de Liberación Gay, por lo que fue definido por algunos como el momento Rose Park de la lucha por los derechos LGTB, la mujer afroamericana detenida, 14 años antes en Alabama, tras negarse a ceder su sitio en el autobús a un blanco y que fue uno de los detonantes del movimiento de derechos civiles contra la segregación racial en USA.
El Stonewall Inn no era un bar cualquiera. Era un bar regentado por la mafia y frecuentado por drag queens, transexuales, «amanerados» y prostitutas, quizá las personas más marginadas de la sociedad en la época. En alguna parte leí que carecía incluso de agua corriente, por lo que cuando ya no quedaban vasos limpios “reciclaban” los que había. Por entonces las personas homosexuales estaban vetadas de determinadas profesiones como la abogacía o la medicina. Frecuentar un bar gay, en el Nueva York de 1969 te exponía a ser detenido por la policía o a perder tu trabajo. Incluso los bares se exponían a ser cerrados por servir alcohol a una persona homosexual acusados de desorden, por lo que la policía los recorría en busca de sobornos. Marsha P. Jonhson y Sylvia Rivera dos de las personas que se encontraban esa noche en el bar y a las que hoy se les reconoce gran protagonismo en los disturbios de Stonewall y en el movimiento LGTB eran dos personas marginales pertenecientes a minorías étnicas. (más…)