
Moral versus bondad
J. I. González Faus. [La Vanguardia] Los primeros críticos de la moral fueron Jesús de Nazaret y Pablo de Tarso, mucho antes que Nietzsche. Para aquellos dos judíos, la moral no hace bueno al hombre sino que le vuelve fariseo. Como su conducta no es la de los que obran mal, se siente con derecho a juzgar a éstos y a sentirse superior a ellos. Pero, como sólo Dios es superior a los hombres y sólo Él puede juzgarlos, el hombre moral acaba siendo un ególatra que se pone nada menos que en el lugar de Dios. La carta a los romanos, y las parábolas del fariseo-publicano y del “hijo pródigo” dan buena cuenta de eso.
A esta crítica personal, Nietzsche añadirá otra de dimensiones más sociales: la moral efectivamente vuelve fariseos a los que la practican pero, además, convierte en “aprovechados” a todos aquellos que la dictan y en resentidos a aquellos a los que se les impone. (más…)

¿Después de Dios?
J. I. González Faus. Que Dios está ausente de nuestra sociedad europea es un dato innegable, como profetizó Nietzsche. Pero Nietzsche no habló de inexistencia sino de muerte de Dios. Y, para dejar las cosas claras, añadió: “lo hemos matado nosotros”. La ausencia de Dios es, pues, una opción nuestra, no un dato previo a nuestro existir con el que nos encontramos. Las razones de esa opción serán diversas: para que el hombre pueda crecer y ser libre (Marx o Sartre), para liberarnos de ilusiones infantiles (Freud) o para explicar el escándalo del mal… Pero lo que parece claro es que, más que en la inexistencia, nuestra sociedad vive en “el exilio de Dios”, con expresión precisa de Lluís Duch.
Desde los orígenes lo divino parece haber sido percibido como un Poder Supremo al que debemos el ser y que actúa por encima de nosotros. En los grandes poemas homéricos, las acciones humanas (una batalla, una empresa o viaje) no tienen el resultado planeado por el hombre, sino el decidido por algún poder divino superior. (más…)

Libertad
J. I. González Faus. [La Vanguardia] Otra de las palabras más estropeadas del lenguaje. Parodiando a Madame Roland, ferviente partidaria de la revolución francesa, podríamos comentar: “libertad, ¡cuántas esclavitudes se generan en tu nombre!” O con Dostoievski: “partiendo de la libertad ilimitada llego al despotismo ilimitado”.
Vamos a comentar esta definición: libertad es la plena coincidencia con lo mejor de uno mismo. Nunca la conseguiremos del todo. Pero podemos estar orientados y caminar hacia ella.
Los humanos somos seres interiormente divididos; recibimos nuestro ser como tarea de nosotros mismos, y disponemos del libre albedrío para conquistar la libertad. Los antiguos distinguían, por eso, entre libre albedrío y libertad: pues en nosotros puede darse aquella paradoja que lamentaba el Segismundo de “La vida es sueño”: “y yo, con más albedrío, ¡tengo menos libertad!”. (más…)

La imagen de Dios en la nueva situación cultural
Cristianisme i Justícia. El próximo lunes 13 de octubre tendrá lugar la inauguración del curso de Cristianisme i Justícia con la conferencia ofrecida por Andrés Torres Queiruga: «La autonomía del mundo: ¿Cómo seguir creyendo desde un cultura que no necesita a Dios?». Por este motivo hemos querido recuperar uno de sus muchos artículos condensados por la revista Selecciones de Teología. En «La imagen de Dios en la nueva situación cultural» presenta el autor las condiciones que en nuestra condición cultural hacen creíble cualquier lenguaje sobre Dios. Se trata de un buen resumen de las posturas que Torres Queiruga ha venido defendiendo en los actuales foros teológicos.
···
Andrés Torres Queiruga. “¿Cómo puede usted repetir ‘Dios’ una y otra vez? ¿Cómo puede esperar que sus lectores tomarán la palabra en el sentido que usted quiere que sea tomada? Lo que usted quiere decir con el nombre de Dios es algo por encima de todo alcance y comprensión humanas, pero hablar de él le hizo a usted descender al plano de la conceptualización humana. ¡Qué otra palabra del habla humana ha sufrido tantos abusos, ha sido tan corrompida, tan profanada! ¡Cuánta sangre inocente derramada por ella a despecho de todo su esplendor! ¡Cuánta injusticia cubierta con ella borrando sus trazos santos! Cuando oigo llamar ‘Dios’ a lo más elevado, me parece casi una blasfemia”. (más…)

Sobre la Lumen Fidei. Primerísimas impresiones
J. I. González Faus. Lo que sigue son observaciones a vuela pluma, fruto de una primera lectura rápida de la encíclica. Quede esto muy claro de entrada por si luego aparecen cosas que, en una lectura más lenta, pueden ser matizadas. El mundo mediático tiene grandes ventajas pero a veces hay que pagar ese precio de una dictadura de lo inmediato.
A pesar de las “cuatro manos” a las que el hermano Francisco se refirió humorísticamente, la encíclica me ha parecido más bien un texto casi íntegro de Ratzinger, que Francisco ha tenido la delicadeza de hacer suyo y apenas le ha añadido alguna nota, al principio y al final.
Donde más se percibe esto es en el siguiente detalle: Francisco ha tenido en estos meses de su pontificado una serie de gestos positivos, muy cargados además de simbología y de significado. Pues bien: no he sabido ver en la encíclica un solo párrafo que pudiera ser visto como fundamento teológico de todos aquellos gestos. (más…)
Comentarios recientes