
Moral versus bondad
J. I. González Faus. [La Vanguardia] Los primeros críticos de la moral fueron Jesús de Nazaret y Pablo de Tarso, mucho antes que Nietzsche. Para aquellos dos judíos, la moral no hace bueno al hombre sino que le vuelve fariseo. Como su conducta no es la de los que obran mal, se siente con derecho a juzgar a éstos y a sentirse superior a ellos. Pero, como sólo Dios es superior a los hombres y sólo Él puede juzgarlos, el hombre moral acaba siendo un ególatra que se pone nada menos que en el lugar de Dios. La carta a los romanos, y las parábolas del fariseo-publicano y del “hijo pródigo” dan buena cuenta de eso.
A esta crítica personal, Nietzsche añadirá otra de dimensiones más sociales: la moral efectivamente vuelve fariseos a los que la practican pero, además, convierte en “aprovechados” a todos aquellos que la dictan y en resentidos a aquellos a los que se les impone. (más…)

La sinrazón de un impostor
Voces. Joaquín García Roca. [Levante] A los cuatro años de su elección como obispo de Roma y pontífice de la Iglesia católica, Francisco ha cosechado todas las máscaras imaginables y los ataques arbitrarios e irracionales de los conservadores; se desencadenaron abiertamente tras afirmar que él «nunca había sido conservador», atreverse a «descalificar al capitalismo como un sistema injusto» y desear «una Iglesia pobre para con los pobres». Rubén Amón, brillante e inteligente articulista de El País, en su sección de opiniones, ofrecía un artículo con el título «¿Y si Francisco fuera un impostor?» en el que muestra las resistencias y rechazos que le suscita Francisco. Le atribuye el oficio de «impostor», sustentado sobre el incumplimiento de su cargo; de «prestidigitador», en una sociedad crédula y sensiblera; «papulista» por ser la suya una revolución de las formas y apariencias; «cosmético» por no abordar las trasformaciones de fondo, y «telepredicador» a causa de su excesivo carisma en la comunicación. Nos preguntamos si estas expresiones poseen algún significado real y objetivo, o responden a una época que el autor llama de «percepciones y sensaciones» frente al tiempo de las verdades. (más…)

Laudato si’ y la “ecología integral”
Jaime Tatay. Aristóteles decía en una de las frases más repetidas de la historia de la filosofía que “el ser se dice de muchas maneras”. De muchas maneras, sí, pero fundamentalmente –matiza un filósofo contemporáneo tratando de aclarar la enigmática frase del pensador griego– como sustancia, es decir, como aquello que no se da en un sujeto sino que es ello mismo sujeto.
Menudo lío, ¿verdad? Pues sí, un auténtico lío que exige estudio y una buena explicación para poder ser resuelto.
Al término ecología, al que también nos referimos “de muchas maneras” en nuestra época, le sucede algo similar a lo del polisémico concepto del ser: es tan maleable como ambiguo. De lo ecológico se habla, y mucho, hasta desgastar su significado. Por eso, al final, cuando hablamos de ecología (o de sostenibilidad o de medioambiente) no sabemos ya muy bien de qué estamos hablando. (más…)

¿Más ética o más control?
Voces. Josep M. Lozano. [Persona, Empresa y Sociedad] Como la inflación sólo nos preocupa en su dimensión económica, nos hemos vuelto insensibles a la inflación verbal.
Y me parece que sólo la inflación verbal puede explicar la profusión con que las palabras ética o moral aparecen en los discursos y las declaraciones, profusión que a menudo revela una incontinencia verbal digna de mejor causa. Ya se sabe: siempre que alguien se siente impotente o indignado frente a algo que le disgusta o que, lisa y llanamente, rechaza, apela patéticamente a una supuesta pérdida de ética y/o valores. “Esto (lo que sea) no pasaría si la gente (o los “x”…) tuviera más ética”.
La razón por la que tanta gente dice estar convencida de que la ética puede salir airosa allí donde la legislación, la política, la gestión, las costumbres o la educación han fracasado, escapa a mis capacidades de comprensión. Mi credulidad es bastante limitada como para aceptar que la pobre ética podrá llegar allí donde las otras no llegan. Francamente: no entiendo cómo podremos resolver mejor los problemas de legislación, de política, de gestión, de costumbres o de educación hablando de ética o apelando a ella. (más…)

Religión y sostenibilidad: ¿Deberían las religiones entrar en el debate ecológico contemporáneo?
Jaime Tatay. Algunas personas cambian su medio de transporte tras la lectura de un informe científico sobre el calentamiento global. Unas pocas modifican su dieta tras ver un reportaje sobre la deforestación en el Amazonas y el papel que la agroindustria juega en ese proceso. Otras, quizá, empiezan a mirar el origen del pescado que compran en el supermercado después de enterarse de los devastadores efectos de la pesca industrial en muchas pesquerías. Las hay, también, que deciden no comprar ropa de determinadas marcas al descubrir las condiciones laborales de las personas que las confeccionan. Hay quien, incluso, acude a su banco a preguntar dónde se están invirtiendo sus ahorros después de leer un artículo sobre comercio y venta de armas. Pero la inmensa mayoría, reconozcámoslo, no lo hacemos.
Como afirma Peter Singer, con una mezcla de ironía, resignación y realismo al reflexionar sobre el comportamiento humano: “los hechos, por si mismos, no nos proporcionan las razones para la acción”. ¿Quién las proporciona entonces? ¿Quién es capaz de motivar, impulsar y sostener el compromiso ético a lo largo del tiempo? ¿Quizás las religiones? (más…)
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