Lucía Montobbio. Hace poco perdí mi trabajo en la redacción, pero sigo siendo periodista. No puedo evitar recorrer los barrios de Barcelona para ver qué pasa en mi ciudad. Cada tarde ocurre algo, por ejemplo hoy, que he llegado hasta Kabul.
Entro en el Palau de la Virreina al ver garabateado «Guillermo Cervera» en una exposición. A lo mejor a alguien le suena el nombre de este fotógrafo -quizás de la sección internacional de La Vanguardia, donde ha publicado junto el periodista Plàcid Garcia-Planas sobre Afganistán-.
Ahora con Libia y Siria, Afganistán suena menos. Ya lo decían los diarios de los Estados Unidos “Nosotros tenemos los relojes, ellos tienen el tiempo”. Es cuestión de días que las tropas internacionales se retiren del país y lo dejen tal y como lo encontraron. Los talibanes volverán.
Guillermo Cervera lo cuenta mejor a través de 49 fotografías. El título de la muestra es Bye-Bye Kabul. El fotógrafo se está despidiendo de momentos que se esfumarán. Las miro y a primera vista no me parecen clasificables en un archivo de guerra. Me gusta sobre todo una donde salen unos cuantos chavales tirándose a la piscina.
En la segunda pasada me leo los pies de foto, ahora ya sí son auténticas fotografías de guerra. No de esas fáciles, con sangre, bombas y muertos. Guillermo se acerca al ciudadano, se interesa por sus vidas. No se queda en la superficie, bucea a metros de profundidad y entonces hace clic. Explica la guerra desde otro punto de vista, des de la vida cotidiana de la gente de Afganistán.
La piscina que me gustaba, la de la fotografía donde chapotean los jóvenes, en tiempo de talibanes está vacía. Desde el trampolín tiran a las mujeres tachadas de impuras. A las que sobreviven, las consideran inocentes.
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Guillermo Cervera (Madrid, 1968) es uno de los fotoperiodistas españoles más interesantes e inusuales. Especializado en surf y guerras, ha publicado en medios tan importantes como The New York Times, Newsweek, The Wall Street Journal, La Vanguardia, Marie Claire o El Mundo. En estos días está exponiendo en el Palau de la Virreina de Barcelona, Bye-Bye Kabul, una serie de fotos en las que retrata una ciudad que pronto será abandonada a su suerte por quienes iban a ser sus salvadores, las fuerzas de la OTAN.
NOTA: La exposición permanecerá en el Palau de la Virreina hasta el 21 de abril de 2013.
Imagen de: Guillermo Cervera/Bye-bye Kabul